Antes de moverme a una pequeña serie de artículos que me han
recomendado escribir sobre la apreciación básica del vino, he decidido escribir
sobre algo de lo que hablé cuando reactivé el blog, algo diferente al
vino. Hoy escribo brevemente sobre una
de las cervezas artesanales hechas en Costa Rica, la Segua, de Costa Rica´s
Craft Brewing Co.
Como una rapidísima reseña, la gente de Costa Rica´s Craft Brewing
Co. se ha esforzado por encontrar un lugar en un nicho poco explotado, el de la
cerveza artesanal. Con dos ofertas
permanentes (Segua y Libertas) y con una serie de ¨seasonals¨, esta pequeña
cervecería ha logrado ubicarse en un buen lugar en la escala de apreciación del
consumidor local.
La Segua es un ¨Red Ale¨, una cerveza que no tiene punto de
comparación en el resto del mercado local.
Su evocativo nombre -derivado de la tradición del espanto conocido como
¨La Segua¨ y que se encargaba de lidiar con los hombres infieles en los tiempos
de nuestros abuelos- y el vistoso diseño de la etiqueta son las primeras pistas
sobre lo diferente que será la experiencia.
El color de este Ale es un rojo cobrizo brillante, altamente
llamativo y distintivo. Su aroma es muy
floral, con pistas de un interesante dulzor.
Al servirla en un vaso apropiado, se nota una buena cantidad de espuma,
muy persistente.
Pero lo que merece una nota aparte y lo que realmente define a la
Segua como un caso de amor u odio, es su sabor.
La Segua cuenta con un alto contenido de lúpulo, que es precisamente lo
que le brinda esa nota tan floral en nariz, pero a la vez le da un amargor que
no es tolerable para todos los paladares.
Aunque el contenido alcohólico de la Segua es alto (alrededor del 6%) no
es muy notorio en el paladar, fácilmente opacado por esa nota amarga tan
predominante.
Mi recomendación sobre este interesantísimo fermentado es que no
se queden sin probarlo (si les gusta o no, es algo que deben decidir ustedes) y
un buen maridaje para esta cerveza será sin duda la comida bien condimentada y
hasta picante, pues cada trago está garantizado para limpiar el paladar y
permitir una renovada apreciación del platillo.
Provecho y Salud!
Carlos Ch.